El pasado fin de semana, el continente fue testigo de dos procesos electorales que probablemente definan el rumbo que ha de tomar la región en los próximos años.
En Colombia, sus habitantes acudieron a las urnas para elegir quienes serán sus representantes al senado, en estas elecciones se evidencio un fuerte respaldo al “Centro Democrático”, partido del ex presidente y actual senador Álvaro Uribe, que alcanzó 19 de los 102 curules.
Con un porcentaje de votación elevado también, se encuentran las agrupaciones políticas “Partido Cambio Radical” con 16 escaños, “Partido Conservador Colombiano” con 15 escaños “Partido Liberal Colombiano” y “Partido Social de la Unidad Nacional” con 14 escaños para cada uno. De esta forma la derecha colombiana mantiene su hegemonía sobre el órgano legislativo.
Como contra peso encontramos que la “Coalición Lista de la Decencia”, del candidato presidencial Gustavo Petro, alcanzó 4 escaños y el “Polo democrático” que alcanzó 5 curules. A estos resultados se suman los 5 escaños que le corresponden, como parte de los acuerdos de paz, a la Fuerza Alternativa Revolucionaría del Común FARC.
En Cuba por su parte, también se llevaron a cabo los comicios que dieron como resultado la elección de 605 diputados para la Asamblea Nacional del Poder Popular. De este proceso cabe destacar que el 82.90 % de los más de ocho millones de cubanos con derecho al voto acudió a las urnas y solo el 5.6 por ciento anuló la boleta o la dejó en blanco, para una validez del 94.4%.
El 2018 será un año de disputa electoral a nivel continental, y estos comicios parlamentarios pueden darnos una idea del rumbo en el que se enfilarán los procesos políticos que resulten triunfantes en las urnas.





